David Curry, presidente de Global Christian Relief, cuestionó un informe sobre el declive de los cristianos en China, atribuido a la represión del Partido Comunista Chino. Curry afirma que muchos defensores de los cristianos perseguidos creen que la comunidad cristiana en China puede estar creciendo, en contraste directo con Pew Research.
En este sentido, destacó que la investigación interna de Global Christian Relief sugiere que las estimaciones de Pew “pueden estar equivocadas hasta en 100 millones, pero nadie sabe realmente el tamaño” de la población cristiana china.
Así, el informe cita investigaciones que indicaron que alrededor de 23,2 millones de adultos en China se identificaron como cristianos en 2010. Mientras tanto, en 2018 esa cifra habría disminuido a 19,9 millones. Sin embargo, tanto Curry como Pew Research señalaron que esas cifras pueden ser inexactas.
Además, la encuesta de Pew destacó que no se puede estar seguro de cómo las circunstancias políticas afectan los patrones de búsqueda, dada la mayor vigilancia gubernamental de la actividad religiosa cristiana. Curry, por su parte, enfatizó que, según Global Christian Relief, sólo una de cada cinco personas se autodeclara.
Según Christian Today, Curry dijo que la Iglesia en China está bajo ataque y enfrenta una presión cada vez mayor desde que el presidente Xi consolidó su control. Estimó que el número de cristianos en China está entre 100 y 120 millones, más que los aproximadamente 98 millones de miembros del PCC.
Así, Curry explicó que el gobierno chino está intentando dividir a las iglesias y obligarlas a actuar de forma clandestina. Contó el caso de una iglesia de 500 personas en China que fue obligada por las autoridades a dividirse en grupos de 100. A pesar de los desafíos, Curry expresó confianza en la resiliencia de la Iglesia en China y cree que continúa creciendo.
Por lo tanto, también advirtió sobre la necesidad de una comprensión más profunda del marco moral del gobierno chino por parte de los líderes empresariales occidentales que buscan éxito en el mercado chino. El líder cristiano indicó la posibilidad de que en el futuro se produzcan presiones similares sobre los cristianos occidentales, incluida la censura, la eliminación de plataformas y las restricciones bancarias a los ministerios cristianos.
“Esto ejercerá mucha presión sobre la Iglesia, pero creo que a largo plazo la Iglesia estadounidense tendrá la oportunidad de crecer de una manera más saludable si responde adecuadamente, así como creo que la Iglesia en China se está volviendo más saludable aún. bajo presión”, concluyó.
