En Uttar Pradesh, en el norte de la India, un centro de oración cristiano fue demolido y posteriormente 18 pastores fueron detenidos acusados de atacar a la policía. El incidente implicó la intervención de nacionalistas hindúes, acompañados de policías, que alegaron ocupación ilegal de tierras en relación con la Iglesia Jeevan Jyoti.
El centro, que existía desde hacía más de una década, quedó completamente destruido y las vías de acceso bloqueadas. Según informaron fuentes vinculadas a la Iglesia Pentecostal de Uttar Pradesh, vinculada al Partido Bharatiya Janata, las autoridades arrestaron a 18 personas en relación con la misión, incluido el pastor Durga Prasad Yadav.
De esta manera, el episodio refleja la ideología hindutva, que promueve la supremacía del hinduismo en la India y ha contribuido a la creciente persecución de los cristianos en el país. Como resultado, India ocupa el puesto 11 en la Lista Mundial de Vigilancia de Puertas Abiertas 2023. La población hindú representa aproximadamente el 80% de la India, mientras que los cristianos constituyen sólo el 0,18% en Uttar Pradesh.
Según CBN News , el gobierno indio ha implementado leyes contra la conversión, utilizadas a menudo como pretexto para intimidar a los cristianos involucrados en actividades religiosas. La justificación de la acción de demolición fue la supuesta eliminación de construcciones ilegales en terrenos públicos.
De esta manera, la persecución de los cristianos en la India refleja la creciente intolerancia religiosa y la influencia de leyes restrictivas que afectan la libertad religiosa en el país. Desde la implementación de estas leyes en 2020, casi 400 fieles han sido arrestados y este número sigue creciendo mes a mes. Actualmente, 89 cristianos, entre ellos un sacerdote católico, se encuentran detenidos en Uttar Pradesh, presuntamente violando estas leyes.
Para muchos cristianos, estas leyes parecen dirigidas contra sus servicios religiosos y oraciones, que atraen a hindúes que buscan curación y paz espiritual sin necesariamente implicar conversiones forzadas. La persecución religiosa en la India refleja una preocupante tendencia a las restricciones a la libertad religiosa en el país.